Junta de Vigilancia anuncia asesoramiento y formación de nuevas comunidades de aguas en Río Chillán

·       En el último catastro de Comunidades de Aguas que registra el Conservador de Bienes Raíces, arroja que en el Río Chillán a través de sus 52 canales, cuentan con 18 comunidades de agua constituidas jurídicamente hasta la fecha.

15 de mayo 2024

Es sabido que la Dirección General de Aguas (DGA) es el único organismo a cargo de registrar y declarar mediante una escritura pública la conformación de comunidades de aguas para que cuenten con personalidad jurídica ante el Código de Aguas. En este sentido, la Junta de Vigilancia del Río Chillán (JVRC) se encuentra asesorando a más de 15 comunidades de aprovechamiento de aguas en su mayoría de las comunas de Pinto y Coihueco, con el objetivo que se desarrollen como instituciones y postulen a proyectos de la Ley de Riego a través de la CNR.

Bajo este marco, el presidente de la JVRC, Héctor Jaque, sostuvo: “En el cumplimiento de nuestros deberes estamos asesorando en conjunto con nuestros profesionales a las comunidades de aguas que aparecen inscritas en el registro que lleva nuestra institución y a las que faltan en el Río Chillán, buscamos con esto que las comunidades de aguas del Río Chillán, las actuales y futuras puedan funcionar, y de esta forma postular a diferentes proyectos que beneficien a la agricultura de nuestra región”.

Por otro lado, respecto a las ventajas y ayudas que conllevaría conformar una comunidad de agua, el presidente de la Junta de Vigilancia, agregó: “al constituirse una comunidad de agua y obtener la personalidad jurídica pueden postular a la Ley 18.450, que es la ley al subsidio al riego, para mejorar la conducción de las aguas intrapredial y extrapredial con las tecnologías y optimizar el recurso”. Además, desde la institución señalan que las comunidades de aguas por medio de la ley mencionada, pueden hacer proyectos para mejorar los canales de conducción de las aguas y los predios.

Por ende, toma gran relevancia la conformación de comunidades de aguas por vía judicial o extrajudicial ante la DGA, ya que pueden optar a un conjunto de infraestructuras destinadas a dirigir el flujo del agua, principalmente fuera de los límites de la propiedad, desde el punto de captación de bocatomas hasta la zona de riego. En este contexto, cada comunidad de agua puede llegar a desarrollar sistemas de distribución para asignar el agua conforme a los derechos de riego de cada agricultor o siguiendo los lineamientos de las Organizaciones de Usuarios de Aguas (OUA) presentes en las áreas de riego.

De este modo, los titulares de derechos de aprovechamientos de agua llamados comuneros, podrán elegir al uso del agua de una corriente superficial, siempre y cuando sea por medio de una obra hidráulica de aprovechamiento común, permitiéndoles a tales comunidades de agua una administración eficiente, equitativa y sostenible de las aguas para la agricultura.

En la actualidad, existen varios beneficios dirigidos a favor de las comunidades de agua, entre los más importantes destacan obras desarrolladas por la Ley de Riego e implementadas por la CNR, que van desde proyectos de revestimiento de canales, mejoras en bocatomas, compuertas automatizadas y asesoramiento profesional, con el fin de administrar de manera eficiente el recurso hídrico ante la crisis climática que afecta a la agricultura en estos momentos en la región de Ñuble.